Los drones son increíbles máquinas para remover a los humanos de tareas peligrosas y pocas actividades son más potencialmente explosivas que el manejo de elementos altamente combustibles como los productos derivados del petróleo.
Desde el inicio de los primeros vehículos aéreos no tripulados (UAV - RPAs), la industria del petróleo y el gas vio la oportunidad de alterar ciertos flujos de trabajo que involucraban a hombres y mujeres en áreas peligrosas, reemplazándolos con robots aéreos y terrestres que recopilarían los datos y permitirían su análisis de forma remota.
A pesar de que probablemente hay miles de historias de éxito asociadas con el despliegue de drones en el área de petróleo y gas, salvar a una refinería de un desastre mayor debe ocupar un lugar bastante alto en la lista.
Gadget Drone Services S.A.S. (Gadget Drone), en Colombia, fue creada por un grupo de ingenieros aeronáuticos precisamente con el objetivo de brindar al pujante sector energético de ese país una alternativa segura y confiable para realizar inspecciones no destructivas usando aviación no tripulada.
Tuvimos la oportunidad de conversar con John A. Quevedo, Gerente Comercial de Gadget Drone, Roberto Copete, Director Técnico y Mónica Zambrano, Gerente General, quienes explicaron cómo se concibió la empresa y cómo las necesidades del mercado la moldearon a de una idea inicial a su forma actual.
"Todo comenzó en 2020 con el comienzo de la pandemia y el hecho de que todos perdimos nuestros empleos en el sector de la aviación por despidos masivos y el colapso de la aviación comercial". Mónica explicó: "Desde el 2019, Roberto, John y yo habíamos estado jugando con la idea de lanzar una empresa de aviación sin tripulación, pero no teníamos el incentivo o la motivación para dejar nuestros lucrativos trabajos en busca de un sueño. Todo eso cambió a principios de 2020 con COVID y nos vimos obligados a ser creativos e improvisar, por lo que fundamos Gadget Drone e inicialmente apuntamos a la lucrativa industria del petróleo y el gas".
A pesar de que Colombia es conocida como un importante productor de insumos agrícolas, como el café, el país sudamericano también produce abundantes recursos minerales, como cobre, esmeraldas y una cantidad considerable de petróleo, en las áreas adyacentes a los abundantes campos de extracción venezolanos al oeste del Lago de Maracaibo.
"Había una gran necesidad de servicios que pudieran realizarse sin demasiado personal y los mismos problemas que afectaban a la industria de la aviación, la enfermedad y el ausentismo estaban teniendo un impacto en las actividades de exploración de petróleo y las refinerías de petróleo, por lo que nos arriesgamos y compramos nuestro primer dron y lo equipamos con sensores que ayudarían a demostrar las capacidades de realizar inspecciones aéreas no destructivas, sin involucrar a demasiados trabajadores". Dijo John enfaticamente.
Colombia está a la vanguardia de la industria de la aviación no tripulada en América Latina, pero la mayoría de las empresas están involucradas en mapeo convencional, video aéreo y fotografía y muchas aplicaciones agrícolas, pero la idea de Gadget Drone de penetrar en la industria del petróleo y el gas estuvo bien considerada y tenía muy poca o ninguna competencia en ese momento.
"Nuestra gran oportunidad llegó mientras inspeccionábamos una Tea de Balance de 95 metros de alto utilizada para aliviar el gas resultante de los procesos de refinería. A 72 metros, el dron, utilizando un sensor de termografía, descubrió un agujero de 6 centímetros de diámetro que estaba succionando aire en el tubo de metal y amenazaba toda la estructura y potencialmente también a la refinería". Roberto dijo un poco tenso: "Surgió una situación de emergencia cuando los ingenieros petroleros y los gerentes de la planta decidieron que el agujero tenía que sellarse de inmediato".
Debido a que la Tea de Balance estaba contenida dentro de una torre de soporte, el tubo real con el agujero estaba a 4 metros dentro del intrincado laberinto de vigas que formaban la estructura exterior. Entre la gerencia de la refinería y el equipo de Gadget Drone se decidió que el dron tenía que ser modificado para realizar la reparación, era la forma más rápida de evitar un desastre seguro.
"¡Imagínese nuestra sorpresa cuando nos encontramos equipando a nuestro dron con un tubo de ocho metros de largo, cuatro metros de un lado con el parche magnético y cuatro metros en el lado opuesto para mantener el centro de gravedad y permitir que el UAV volara estabilizado!" Roberto continuó, "Tuvimos dificultades para mantener un vuelo firme que permitiera a los ingenieros ver claramente dónde estaba el agujero y cómo aplicar el parche, por lo que tuvimos que quitar la cámara del dron fuera de la plataforma y usar un segundo dron para monitorear la operación. Ambos drones fueron controlados por nuestros pilotos expertos y en pocas horas y después de muchos intentos, el parche magnético fue instalado con éxito a la Tea de Balance y se evitó el desastre. Tardamos cuatro días, pero después de eso nos convertimos en un proveedor de servicios de confianza del equipo de gestión de la planta".
Esta inspección inicial y la posterior reparación improvisada abrieron la puerta para que los ingenieros de la petrolera pidieran más servicios y crearan un menú completo de inspecciones no destructivas que podrían ser realizadas por el equipo de Gadget Drone.
"Desarrollamos una serie de procesos para usar sensores de ultrasonido montados en un DJI Matrice 300 para determinar el grosor de estructuras inaccesibles sin tocar la superficie". Mónica dijo reflexivamente: "Eso creó un flujo de ingresos que no esperábamos, y la compañía despegó. Ahora nos estamos expandiendo a diferentes áreas de la industria y agregando servicios y sensores a nuestra oferta".
No importa cómo se inicie el negocio, siempre es lo inesperado lo que trae éxito o fracaso a las empresas emergentes. En este caso el equipo de pilotos e ingenieros de Gadget Drone encontró una manera de convertir un posible desastre en un logro comercial y el resultado es otra historia de éxito de aviación sin tripulación.
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